LEONA DE BAENA
Escultura de influencia oriental y griega que posiblemente serviría para proteger un monumento funerario. Se trata de una leona tumbada en actitud amenazante sentada sobre las cuatro patas. Se conservan íntegras las dos traseras y, en las delanteras, faltan las garras. Está tallada únicamente por su cara frontal, ya que la posterior se adosaría a uno de los lados del monumento funerario.
La presencia de esculturas de animales salvajes o míticos como protectores simbólicos era una de las características de las necrópolis ibéricas de los siglos VI y V a.C. Durante este período, los monumentos funerarios señalizan las necrópolis y las estructuran por zonas adscritas a cada grupo familiar.
Según las técnicas y la estética usadas, se considera que esta leona sigue prototipos griegos arcaicos. Estas esculturas se esculpían sobre piedras blandas, calizas o areniscas (en este caso caliza), con cinceles, gubias y punteros.
Características de la obra
Figura Dimensiones
Altura = 51 cm.; Longitud = 95cm.; Anchura = 26 cm.
Técnica
Tallado
Materia
Caliza