La Cueva del Yeso sobrevivió a la Noche.
Por los espeleólogos entró en el Día.
Oportunidad es del Mañana de los vivos
pues jamás ya será de los muertos.
Tendrá la Cueva que justificar su Fama
para dejar de ser Abismo negro.
Oye allí dentro los silencios
como si carecieras de oído.
Ve los yesos con el ojo de otro
para entender que la luz vino.
Dentro, inmortal está la Paz
sin ortografía de antepasados
en espera de tu sobrecogimiento
ante el misterio que impregna
tan sinuoso y profundo hundimiento.
José Javier Rodríguez Alcaide
(*) Dedicado a Maria Jesús Serrano y a Jesús Rojano.
Fotografía: El espeleólogo José Antonio Mora y la concejala Manuela López, en la visita de ayer.